El fuerte viento, con algún tornado incluido, y la lluvia han sido los protagonistas de la segunda jornada de la Escuela de la PGA Spain que se disputaba hoy en Cádiz, ya que han obligado a la suspensión de la competición cuando muchos jugadores no habían hecho ni salir al campo (los que hoy jugaban en Novo Sancti Petri). Con este panorama, ya se ha determinado que la prueba tendrá un único día de competición entre los 60 que superen el corte.
A Ion García Avis y Miguel Erice les ha pillado el vendaval en el Meliá con siete (y +5 golpes) y cinco (+2 golpes) hoyos, respectivamente, y unas condiciones de juego infernales. 'Estaba todo muy difícil', confesaba Ion, 'era imposible mantener la concentración. A mi el viento me ha movido dos putts de metro y medio, y me los ha dejado a más de tres. Cuando han parado la prueba se ha creado cierta confusión, porque nuestro resultado cuenta para mañana, y había mucha gente que no he hecho ni empezar'.
Aunque ya no queda margen para el error, a Ion se le veía confiado: 'habrá que concentrarse a tope, pero primero tendremos que ver cómo sale el día, intentar entrar entre los 60 primeros, y así jugar también el último día'.
LOS SENIORS, TAMBIÉN PERJUDICADOS
A escasos kilómetros de alli, en Costa Ballena, también se ha tenido que aplazar la última jornada de la competición de dobles del Open de España de Senior (lo que ha dado el triunfo a los norirlandeses), y la competición individual, que debe iniciarse mañana con la participación de navarro Juan Carlos Ibáñez, estará pendiente del tiempo hasta el último momento.
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