Como en todo, las nuevas aplicaciones tecnológicas en el golf pueden resultar un gran avance. El problema es, generalmente, la relación coste-beneficio que puede existir en un momento. No obstante incluso los primeros pensadores de todos los tiempos tuvieron problemas para exponer sus ideas y, más cerca en el tiempo, ¿Alguien se acuerda de cuánto costaba un DVD?El caso es que se pueden aplicar millones de ideas a un campo de golf y una de ellas uniendo dos de las pasiones de Golf Navarra, el deporte e internet. Hablamos del WiFi. En los próximos años todo campo de golf que se precie tendrá su propia red privada, no nos referimos sólo en la sede social, sino en todo el campo.
La red WiFi ofrecerá a los gestores la posibilidad de controlar un sistema propio de comunicaciones, seguridad, supervisión y control. Hoy en día, casi todos los jugadores llevan un dispositivo con aplicaciones que podrían dar mucho juego como móviles GPRS, UMTS o 3G. Se puede tener la oficina de trabajo entre el hoyo 7 y el 8, comprobar la distancia
de la bola hasta el hoyo con un sistema GPS, crear un software de gestión del campo, medir las distancias entre elementos y obstáculos del campo ayudando a decidir los palos, atender peticiones de bebida y comida al bar... infinidad de posibilidades...El esfuerzo es grande, pero ¿Qué gana el campo? Desde nuestro punto de vista, probablemente, uno de los bienes más preciados en el mercado: diferenciación. Un valor añadido que que atrae nuevos clientes por un mejor servicio. En muchos campos de Canada y EEUU ya están integrando esta nueva tecnología ¿Cuánto tardara en llegar? Por si quieren animarse el ejemplo del campo Mayfair Lakes, que ha tenido que comprar 10 carros más porque no podía con la demanda y hasta ha tenido que cambiar su eslogan a "Donde los negocios y el golf se unen". Bendita tecnología.
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